La ciudad avanza en cooperación estratégica financiada por la Unión Europea con una inversión superior a 2 millones de euros.
Avellaneda continúa consolidando un modelo de desarrollo urbano integrado, inclusivo, innovador y sostenible a través del proyecto URB3iS, financiado por la Unión Europea con más de 2 millones de euros. En este marco, una nueva delegación municipal, encabezada por el intendente Gonzalo Braidot, viajó a Europa para realizar la tercera misión institucional-estratégica del programa.
Encuentros clave en Italia y ampliación de lazos internacionales
Durante la visita al Comune di Pordenone, Italia, socio estratégico del proyecto, la comitiva mantuvo reuniones con representantes locales y de la Unión Europea para fortalecer la cooperación en formación e innovación laboral entre Avellaneda y la Región del Friuli Venezia Giulia.
Además, se avanzó en un acuerdo para el hermanamiento entre Avellaneda y Udine, que fomentará el trabajo conjunto entre ambas ciudades, la Asociación Civil Impulsar Avellaneda (ACIA) y la organización Legacoop. El foco está puesto en potenciar el Centro de Desarrollo Rural, con énfasis en formación, desarrollo territorial y cadenas de valor rurales.
Expansión de la red de cooperación en España y Portugal
La misión también incluyó una visita al Eixo Atlántico, que reúne a 42 municipios del norte de España y Portugal. En este espacio, se retomaron acuerdos anteriores y se exploraron nuevas oportunidades de colaboración en temas de desarrollo sostenible y planificación urbana, ampliando la red internacional de Avellaneda.
Impulso a emprendedores y economía del conocimiento
Acompañaron la delegación dos emprendedores ganadores del concurso de ideas innovadoras “Innpulsate” (ediciones 2023 y 2024): Cubic.Ar y MINKA, con proyectos vinculados a logística y economía circular. Ambos participaron de intercambios de experiencias en emprendimiento, tecnología y sostenibilidad, reforzando el compromiso de la ciudad con el talento joven y la economía del conocimiento.
El proyecto URB3iS se posiciona así como un pilar fundamental para proyectar a Avellaneda hacia un futuro más inclusivo, resiliente y lleno de oportunidades, impulsado por la cooperación internacional y el intercambio de buenas prácticas.