 
        Investigadores del Conicet lideraron un proyecto internacional que descifró el genoma de la yerba mate (Ilex paraguariensis), una planta clave para la industria del mate, bebida con cafeína muy consumida a nivel global. Este avance, publicado en la revista eLife, proporciona una herramienta para el mejoramiento genético de la planta, permitiendo su adaptación a diferentes climas y suelos, así como su aprovechamiento en la industria alimentaria, farmacéutica y biotecnológica.
El proyecto, dirigido por Adrián Turjanski, se centró en entender cómo la yerba mate produce cafeína, uno de sus componentes más importantes. A pesar de la creencia popular, el mate contiene cafeína, no “mateína”. La secuenciación del genoma, con 53.390 genes, reveló que la yerba mate tiene una ruta biosintética de cafeína distinta a la del café y el té, lo que sugiere una evolución convergente en estas especies.
Este avance también abre la posibilidad de desarrollar variedades de yerba mate sin cafeína para consumidores que prefieren evitarla, además de explorar nuevas aplicaciones con compuestos beneficiosos para la salud, como propiedades antioxidantes, antidiabéticas y estimulantes del sistema nervioso.
El proyecto fue realizado con la colaboración de investigadores de Argentina, Estados Unidos y Brasil, y podría tener un gran impacto en la industria agrícola y biotecnológica.
 
                         
         
         
         
         
         
        