Georgina Duarte, enfermera del Hospital Garrahan, alertó sobre la crítica situación salarial que atraviesa el personal de salud del centro pediátrico y lanzó una dura advertencia al presidente Javier Milei: “Lo invitamos a recorrer el hospital y ver cómo trabajamos por sueldos miserables”.
En declaraciones con este medio, Duarte describió con crudeza el drama cotidiano que enfrentan:
“Cobré y ya no tengo más plata. Es empezar a sobrevivir con lo que te queda. Mi sueldo cubre el 50% del alquiler; el resto se va en servicios que están carísimos”, explicó.
La trabajadora del Garrahan, cuyo único empleo es en ese hospital, denunció que muchos de sus compañeros cobran entre $600.000 y $800.000, cifras por debajo de la línea de pobreza. “No es verdad lo que está diciendo el Presidente. Si realmente piensa eso, está equivocado”, sentenció, en alusión al discurso reciente de Milei.
“Que venga y lo vea con sus propios ojos”
Lejos de victimizarse, Duarte optó por invitar al mandatario a conocer el trabajo que realiza el personal del hospital:
“El trabajo en el Garrahan es titánico. No nos identifica nada de lo que dice Milei. Sabemos cómo trabajamos, y la población también lo sabe”, apuntó.
En ese sentido, subrayó que “en el Garrahan sabemos cuáles son nuestros derechos y no tenemos miedo de hacerlos valer”. Y advirtió: “Quizá le cueste caro al Presidente hablar de esta manera de trabajadores que nos formamos para cuidar a la gente, a los niños”.
Guardias desbordadas y éxodo de personal
Duarte también se refirió a la creciente crisis interna que enfrenta el hospital:
“Desde fines del año pasado, renunciaron 200 trabajadores de planta permanente por bajos ingresos, y hay muchos más por presentar la renuncia”, reveló.
Asimismo, apuntó contra el deterioro del sistema de guardias y la sobrecarga del personal activo:
“Desde las 16 horas, muchas salas quedaron sin médicos residentes y se tuvo que redistribuir pacientes, lo que aumentó el trabajo del resto del equipo y complicó el ambiente laboral”, explicó.
Faltante y caída en la calidad de insumos
Como parte de un panorama general alarmante, la enfermera denunció una caída en la calidad de insumos médicos y faltantes que afectan el servicio diario.
“No es la misma calidad de insumos que teníamos hace unos años. Incluso hubo momentos en que nos quedamos cortos con los pañales. Nunca había pasado eso”, advirtió.
Duarte resumió el sentimiento de una gran parte del personal de salud del país, que enfrenta una realidad económica asfixiante. En medio de un conflicto en alza, su testimonio se convirtió en una voz potente que pone el foco en el drama sanitario detrás del discurso oficial.