Las importaciones de ropa y textiles para el hogar crecieron hasta un 109% en el primer trimestre del año. La industria nacional alerta por cierres, pérdida de empleo y subfacturación.
El ingreso de prendas del exterior marcó un récord histórico en el primer trimestre de 2025, con un crecimiento interanual del 86% en ropa y del 109% en textiles para el hogar, según un informe de la Fundación ProTejer.
Este incremento sin precedentes llevó el componente de productos importados al 67% del total de prendas consumidas en el país, dejando solo un 33% de participación a la producción nacional. En el segmento de shoppings, la proporción es aún más crítica: el 75% de la ropa vendida proviene del exterior.
Boom del e-commerce y alerta por subfacturación
Las compras vía courier, vinculadas al comercio electrónico, también se dispararon a niveles tales que los aeropuertos debieron ampliar su infraestructura para poder atender la demanda.
A pesar del fuerte aumento en las cantidades importadas, los valores en dólares crecieron mucho menos, lo que encendió señales de alerta. ProTejer advirtió sobre posibles maniobras de subfacturación, facilitadas por la eliminación de valores criterio y controles en Aduana.
En ese sentido, la fundación señaló que los tejidos de punto llegaron al país con un precio FOB promedio 45% más bajo que el registrado en igual período de los últimos diez años.
Preocupación por el futuro de la industria
Desde la entidad alertaron que este contexto “evidencia la presión externa que enfrenta la industria textil”, sumado a un “debilitamiento estructural del entramado productivo”.
“El retroceso se traduce en cierres de empresas, pérdida de empleo y desinversión”, aseguraron, advirtiendo que la industria opera “en condiciones desfavorables, mientras compite con productos importados favorecidos por la política económica actual”.