La expedición histórica se transmitió en vivo durante 21 días y alcanzó casi 18 millones de visualizaciones, revelando corales de aguas frías y biodiversidad inédita a 3.900 metros de profundidad.
La expedición científica “Underwater Oases of Mar Del Plata Canyon: Talud Continental IV” liderada por el Conicet, a bordo del buque R/V Falkor del Schmidt Ocean Institute, marcó un hito histórico en la investigación y divulgación científica sobre el océano profundo.
Durante la misión, que se extendió por 21 días, se descubrieron 40 nuevas especies y se documentó una sorprendente diversidad de corales a profundidades que alcanzan los 3.900 metros.
Un Furor Inédito en la Ciencia
El evento fue transmitido en vivo a través de plataformas como YouTube y Twitch, alcanzando cifras nunca vistas en las transmisiones científicas: casi 18 millones de visualizaciones. De acuerdo con el Conicet, “mientras que la mayoría de las inmersiones de otras campañas tienen una media de alrededor de cuatro mil visualizaciones, esta expedición tuvo una media de quinientas mil por inmersión”.
Innovación y Tecnología al Servicio de la Ciencia
El equipo utilizó el ROV SuBastian, un vehículo operado de manera remota que permitió capturar imágenes submarinas en ultra alta definición y recolectar muestras sin alterar el entorno. Entre los hallazgos más relevantes se encuentran los arrecifes de coral a 1.014 metros de profundidad, formados por Bathelia candida, y extensos campos de Anthomastus sp., un coral blando rojo a 1.500 metros. Además, se identificaron especies como anémonas de mar, pepinos de mar, erizos, caracoles y crinoideos.
El Futuro del Estudio y Análisis
Daniel Lauretta, jefe de la expedición y científico del Conicet, explicó que ahora comienza una etapa crítica de trabajo en laboratorio y computadoras. “Estamos reconociendo las especies nuevas y describiendo lo que vimos, revisando géneros, familias, literatura para hacer comparaciones, y esa etapa nos puede tomar meses o años”, detalló Lauretta.
Además, el análisis de microplásticos y carbono azul será una tarea fundamental que llevará al menos seis meses. La revisión de las más de 200 horas de filmación también se presenta como un proceso prolongado pero esencial para consolidar los descubrimientos y comprender la rica biodiversidad del cañón submarino.
El Legado de la Misión
Este logro no solo abre nuevas puertas para la biología marina y la conservación del medio ambiente, sino que también demuestra el potencial de la ciencia para conectar con la sociedad, al transmitir en vivo la maravilla de explorar los rincones más remotos del planeta.