Esta mañana, cientos de empleados del sector textil se concentraron para reclamar soluciones ante la falta de respuestas de la patronal, tras la audiencia pública convocada por el juez Lorenzini.
Como estaba previsto, los trabajadores se reunieron temprano, portando carteles y pancartas con mensajes de defensa de sus puestos laborales. La movilización se organizó luego de la audiencia pública del viernes pasado, donde participaron representantes de los empleados y empresarios del sector. Durante esa instancia, se discutieron las dificultades que atraviesan las fábricas locales, aunque según los trabajadores, no se lograron compromisos concretos.
Juan Carlos Bandeó, uno de los referentes de los empleados, señaló que “algunos empresarios presentes dejaron claro que no tienen intención de resolver la situación mientras no haya presión de nuestra parte”. Además, recordó que, a pesar de los contactos realizados mediante Zoom, “el mutismo de la patronal continúa y no hay señales de avances en los compromisos anunciados”.
Próximos pasos
Los trabajadores indicaron que buscarán instancias de diálogo con otras autoridades, incluyendo reuniones con representantes religiosos de la comunidad, como el Obispo local, para intentar mediar en la situación. Aun así, reconocen que el panorama es complejo y que la continuidad de la protesta dependerá de las respuestas de la patronal en los próximos días.
Mientras tanto, la movilización continúa organizada por los propios empleados, con una combinación de presencia en la calle y comunicación con medios locales, como la radio regional, para mantener informada a la población sobre la situación en la región.
Situación del sector
El sector textil ha atravesado meses de incertidumbre, con retrasos en los pagos y problemas estructurales que afectan la continuidad laboral. La falta de acuerdos concretos con los empresarios ha generado preocupación entre los empleados, quienes advierten que la defensa de sus fuentes de trabajo es una prioridad para la comunidad y la economía local.
La movilización de hoy refleja el descontento acumulado y la necesidad de medidas urgentes para garantizar estabilidad en los puestos de trabajo, además de abrir un canal de diálogo efectivo con los responsables de las empresas del rubro.