Según informaron fuentes oficiales de la Casa Gris, el gobierno de Santa Fe anunciará este sábado a la mañana «nuevas medidas de convivencia en el marco de la pandemia» que regirán en todo el territorio provincial. Si bien no trascendió de qué se tratan las nuevas disposiciones, por lo menos parte de los anuncios girarían en torno a las clases presenciales a los departamentos Rosario y San Lorenzo, que se vieron suspendidas el domingo 2 de mayo por una semana tras la clasificación de «alarma epidemiológica y sanitaria» que determinó el DNU nacional.
El decreto establece en su artículo 3° que «los departamentos de más de 300.000 habitantes, serán considerados en situación de alarma epidemiológica y sanitaria cuando la incidencia (casos acumulados en los últimos 14 días por 100.000 habitantes) sea igual o superior a 500 y el porcentaje de ocupación de camas de terapia intensiva sea mayor al 80 por ciento». Para los distritos ubicados en esa categoría se establecen restricciones similares a las de la fase 2: el cierre de centros comerciales, shopping, casinos, bingos, discotecas y salones de fiestas. Y, además, la suspensión de las clases presenciales.
Los últimos datos oficiales disponibles indican que el departamento Rosario tiene una incidencia de casos de 706 y en San Lorenzo ese mismo indicador se ubica en 572. Si bien este último departamento no tiene en sí mismo más de 300.000 habitantes, Nación lo considera como parte del aglomerado urbano Rosario, por su extrema cercanía, y por eso también se lo declaró en situación de alarma epidemiológica y sanitaria. Además, en toda la provincia la ocupación de camas críticas es superior al 90%.
En los últimos días, Perotti mantuvo reuniones con el ministro Santiago Cafiero y el presidente Alberto Fernández en la ciudad de Buenos Aires para tratar de revertir la suspensión de la presencialidad escolar en los dos departamentos del sur de la provincia. Aunque Santa Fe optó por acatar la disposición nacional, inició un proceso de diálogo que se desarrolló durante toda la semana. Durante esos encuentros, el gobernador explicó a las autoridades nacionales que los hospitales de ciudades como Santa Fe o Rosario no trabajan al límite por la cantidad de casos de covid que se registran en esos conglomerados, sino porque además reciben derivaciones de pacientes de otros departamentos.
Los argumentos de Santa Fe
Los argumentos que esgrime la Provincia para pedir la reclasificación son, por un lado, que durante la semana hubo un aumento de camas críticas, a partir de los respiradores enviados por el Ministerio de Salud de la Nación; y, por otro, sostienen que Rosario tiene una alta ocupación porque es una ciudad a la que se derivan pacientes desde otros departamentos.
«El gobernador estuvo en Buenos Aires demostrando cómo pudimos expandirnos. Creo que debemos continuar con la presencialidad escolar, salvo que la situación epidemiológica agrave el cuadro. Las burbujas educativas están bien cuidadas, tenemos que hacer hincapié en lo que pasa afuera de la escuela, con la familia y los amigos», expresó esa misma línea el secretario de Salud provincial, Jorge Prieto, este viernes al mediodía.
Fuente. Aire de Santa Fe
