El histórico jugador de Unión de Santa Fe, Óscar “Choclo” Regenhardt, comparte su experiencia trabajando con jóvenes futbolistas en Japón y sus reflexiones sobre el fútbol argentino.
Este jueves, en una charla exclusiva con Vivos y Sueltos, Óscar “Choclo” Regenhardt, un referente histórico del fútbol, recordó su paso por Unión de Santa Fe y cómo su carrera ha dado un giro internacional, trabajando actualmente con jóvenes futbolistas en Japón. En este sentido, compartió detalles sobre su labor en las escuelas Boca Japón, en donde la metodología de enseñanza, la disciplina y el respeto son clave en la formación de los chicos.
La experiencia en Japón: un modelo de disciplina y trabajo individual
Óscar Regenhardt, quien fuera coordinador de las escuelas de fútbol en Japón, comenzó su labor tras ser enviado a Tokio por el presidente de Boca Juniors, para colaborar en la creación de una escuela con el nombre de Boca Japón. Durante su visita, que se extendió por más de una década con 11 visitas al país asiático, Regenhardt pudo notar las diferencias fundamentales en la enseñanza del fútbol en Japón respecto a Argentina.
“El jugador japonés tiene mucha paciencia. Está acostumbrado a repetir los ejercicios una y otra vez hasta perfeccionarlos. Si un chico tiene que hacer un ejercicio 10 veces, lo hace sin problema”, comentó Regenhardt. Sin embargo, también destacó un desafío importante para los jóvenes japoneses: “Cuando se trata de trabajo grupal, les cuesta mucho. El desafío es combinar su habilidad individual con la interacción en equipo, algo que para los argentinos es mucho más natural debido a nuestra creatividad en el juego,” explicó.
El impacto de la cultura en el fútbol japonés
Regenhardt también habló de la cultura japonesa y cómo ha influido en el crecimiento del fútbol en ese país. Destacó el respeto, la organización y la disciplina como elementos clave de la sociedad japonesa, que se reflejan en la enseñanza del fútbol. “Allá todo está muy organizado. Los chicos llevan una mochila con un chip que se conecta con los celulares de los padres, quienes pueden ver exactamente dónde están sus hijos en todo momento,” relató.
A su juicio, la enseñanza del fútbol en Japón se ha profesionalizado enormemente en las últimas décadas, y con la contratación de técnicos sudamericanos, como brasileños y argentinos, el país asiático ha logrado incorporar el estilo de juego que distingue a Sudamérica. “Hoy en Japón hay más de 12 jugadores en ligas europeas, algunos en la Champions League. El fútbol japonés ha crecido y sigue creciendo, y es algo de lo que todos deberíamos estar orgullosos,” dijo.
Reflexiones sobre el fútbol argentino y la formación de los jóvenes
Durante la conversación, Óscar también reflexionó sobre la actualidad del fútbol en Argentina. “La clave está en la formación de los chicos, no solo en lo técnico, sino también en los valores que les transmitimos. El respeto, la disciplina y la responsabilidad son fundamentales en el proceso,” afirmó. Además, opinó sobre la importancia de enseñarles a los jóvenes a comportarse correctamente dentro y fuera del campo.
“Es cierto que hemos visto cambios en los últimos años, pero es necesario seguir trabajando en la formación integral de los futbolistas, con énfasis en el equilibrio y la coordinación. Debemos preparar a los chicos para que no solo sean buenos jugadores, sino también buenas personas,” agregó Regenhardt.
El deseo de regresar a Unión
El histórico exjugador de Unión también aprovechó la oportunidad para responder a la solicitud de los hinchas de la institución, quienes le pidieron que regresara para dirigir las inferiores del club. “No puedo volver a Unión porque, como representante del club, tenemos un sello y no podemos trabajar allí. Lo intenté, hablé con los presidentes en su momento y les ofrecí mi ayuda, pero no se dio,” comentó, y añadió que, aunque no está en sus planes regresar, está dispuesto a colaborar siempre que sea necesario.
Un mensaje a las futuras generaciones
Con la pasión que lo caracteriza, Óscar Regenhardt cerró la entrevista con un mensaje para los jóvenes futbolistas y entrenadores. “La experiencia y el aprendizaje son fundamentales. A medida que avanzamos en nuestra carrera, vamos entendiendo más cosas. Es importante escuchar, leer y estar siempre dispuestos a aprender. El camino nunca termina,” concluyó.
“Siempre estoy dispuesto a compartir mi experiencia con otros entrenadores y chicos. Es lo que más me gusta hacer, y siempre me gustaría poder aportar algo positivo al fútbol,” concluyó el exjugador de Unión, quien sigue siendo una figura muy respetada tanto en Argentina como en Japón.